A pesar de que existe un reglamento de instalación y medidas establecidas para instalar una estación de este tipo.

Son lugares de riesgo en esta ciudad de La Piedad, donde las autoridades municipales han autorizado la instalación de estaciones de carburación, donde se han colocado tanques de 5 mil litros de gas licuado a presión para despachar gas a vehículos y tanques que asisten a ser llenados.

Se les llama lugares de riesgo, porque las tres estaciones que se han instalado en la ciudad se encuentran cerca de polígonos habitacionales, y a pesar de que la posibilidad de un estallido es muy complicado que se dé, una fuga de gas puede ser un peligro inminente para quienes se encuentran alrededor y más que nada cuando se trata de viviendas.

A principios de este 2013 se han llevado a cabo las aperturas de dichas estaciones de carburación, tales como la que se encuentra sobre el inicio de la carretera que va a Numarán, la que se encuentra cerca de la salida a Guadalajara sobre el bulevar Lázaro Cárdenas a la altura del destacamento de Caminos de la Policía Federal y otra que se instaló sobre el bulevar Juan Pablo II y que se encuentra justo a un costado de un lugar de reunión como es el salón del Sindicato de la Comisión Federal de Electricidad.

Para llevar a cabo la instalación de estas estaciones de carburación, se debe cumplir con una serie de requisitos a través de la Secretaría de Energía, donde una de las finalidades que se persiguen es la de no estar cerca de gasolineras o zonas de concurrencia, es decir, a lugares donde se reúnan personas, ya que en caso de que se dé una fuga de gas y existan personas dormidas, el gas ingresa a los pulmones, y debido a que es más pesado que el oxígeno, la asfixia se manifiesta, y por consecuente es causa de muerte.

En el interior de esta ciudad, es más común apreciar estos despachos de gas y es entonces que la situación de torna temerosa, ya que ciudadanos de diversos puntos de la ciudad que se encuentran cerca de estas estaciones, han levantado la voz ante este medio con el fin de que se dé a conocer su temor, ya que han considerado que estas estaciones deben estar en zonas más lejanas y no en zonas muy transitadas y cerca de los hogares.

La preocupación ha ido creciendo entre los vecinos, quienes han manifestado descontento por el actuar de las dependencias gubernamentales que han autorizado la instalación de estos despachos de gas.

Así que la atención de los ciudadanos afectados se ha comenzado a desviare hacia el temor que les ha creado este tipo de negocios cerca de los polígonos habitacionales.

Es así, que en la misma situación, se encuentra la zona de Santa Ana, donde al igual, el Gobierno Municipal ha permitido el establecimiento de estos despachos de gas en zonas concurridas.

Así que, el temor a que se presente una situación de peligro en los alrededores de algunas de estas estaciones se encuentra inminente.