Luis Chávez, “El Canelo” piedadense, se quedó con la ganas de pelear en el evento Yokkao Next Generation del pasado sábado en Xalapa, Veracruz, esto, toda vez que su rival emergente se “rajara” a pelear por una diferencia de peso de 600 gramos.

La suerte no acompañó al peleador michoacano; en primera instancia al quedarse sin el rival pactado, Gabo Rico y posterior, porque el segundo contendiente destinado tras el hecho anterior, Carlos Platas decidiera no subir al ring.

De paseo resulto el viaje para Luis Chávez, que pese a la paciencia de esperar contrincante y al esfuerzo de los promotores por conseguirle uno, tuvo que conformarse con ser espectador y volver entero a su ciudad.

Respecto al hecho comentó Oscar Flores, entrenador del “Canelo”, que “normalmente esa diferencia de peso no es impedimento para realizar un combate ya que no era mucha la diferencia, pero pues a final de cuentas sirve de experiencia”.