Con la resaca del campeonato y la cabeza fría tras el festejo del primer título que Diamantes La Piedad consiguió en la Liga de béisbol de Penjamillo, Refugio “Cuco” Gallegos, coach de esta novena, indicó que la concentración del equipo y ganar los juegos 3 y 4 hicieron la diferencia.

“La clave fue que el equipo de nosotros se concentró, cada jugador se concentró en su posición, en lo que tenían que hacer al momento que lo tenían que hacer y el pitcheo, manejándose bien las estrategias”

Y es que, la escuadra piedadense alzó el trofeo que lo avala monarca de la temporada 2016 al ganar el quinto cotejo de la serie final 11-2, que la colocó 4-1 favor de La Piedad, suficiente para proclamarse campeones.

Ante ese triunfo, dijo “Cuco”, que haberlo conseguido de tal manera permitió concretar el objetivo.

“Fue mucho muy importante ya que eso nos dio motivación y más por la forma en que se ganó con jonrón de “Pancho” Bejar en la última entrada dejando en el terreno a Bravos, a nosotros nos motivó y a ellos mentalmente los bajo. No es lo mismo llevar una serie de visita 2-2 a llevarla 3-1 a favor de nosotros”, aseveró.

A su vez, relató que el juego que los convirtió en campeones se disputó con bastante intensidad y nerviosismo, considerando que fue definitivo en la serie.

“Afortunadamente salimos con la victoria pero fue un juego muy tenso, muy dramático, hubo entradas nerviosas de parte de ellos, de nosotros. Tuvimos tres cajas llenas y no pudimos anotar, pero el bateo oportuno de Francisco Bejar que destacó con dos jonrones, produciendo dos carreras. Robledo, el cátcher de nosotros que conectó un jonrón de dos carreras; el maestro   Rufino con su intervención vino con un hit que produjo dos carreras que de ahí se vino un rali de siete carreras”, precisó.